Cámara de Representantes de EEUU aprueba plan de gastos y aleja la amenaza de un cierre del gobierno

Tras un reporte de IPC menor al esperado para octubre, continúan llegando noticias desde Estados Unidos que traen alivio a los mercados globales.

Porque además de la inflación, la incertidumbre sobre una crisis fiscal, era otro de los fantasmas que angustiaba a los inversionistas de Wall Street.

Pero durante la tarde de este martes la emergencia bajó de nivel, luego de que los legisladores de la Cámara de Representantes lograran un acuerdo para aprobar un proyecto de ley de financiación gubernamental temporal, que reduce en gran medida el riesgo de un cierre del gobierno.

Los demócratas salieron a respaldar al recién elegido presidente de la Cámara Mike Johnson, un republicano cuyo plan generó la oposición de los miembros de línea dura de su partido porque no contempla recortes del gasto gubernamental ni cambia las políticas migratorias.

Un total de 209 demócratas votaron junto con 127 republicanos a favor de la medida, que necesitaba una mayoría de dos tercios para ser aprobada mediante un proceso acelerado. Noventa y tres republicanos votaron en contra del plan de su nuevo líder, junto con dos demócratas.

“Una vez más, la mayoría republicana necesita votos demócratas para gobernar”, dijo Rosa DeLauro, la principal demócrata en el panel de gastos de la Cámara.

El resultado es un respiro para Johnson, quien tendrá hasta el próximo año para negociar el gasto anual si la medida es aprobada por el Senado, como se espera, y es firmada por el presidente Joe Biden.

Próximos pasos

Moody's Investors Service rebajó el viernes la perspectiva de la calificación crediticia de Estados Unidos de estable a negativa citando precisamente los crecientes riesgos fiscales del país y específicamente señaló la polarización política en el Congreso.

La legislación pasa ahora al Senado, donde se espera que la mayoría demócrata la respalde, aunque no incluye la ayuda a Ucrania e Israel que apoyan. Los líderes del Senado necesitarán la cooperación de todos los senadores para superar los obstáculos procesales y cumplir con la fecha límite del viernes por la noche, cuando caducan los fondos federales.